Ir al contenido principal

APRENDIENDO EN EL SILENCIO

Galatas 1:15-18

Pero cuando agradó a Dios, que me apartó desde el vientre de mi madre, y me llamó por su gracia, revelar a su Hijo en mí, para que yo le predicase entre los gentiles, no consulté en seguida con carne y sangre, ni subí a Jerusalén a los que eran apóstoles antes que yo; sino que fui a Arabia, y volví de nuevo a Damasco. Después, pasados tres años, subí a Jerusalén para ver a Pedro, y permanecí con él quince días.

No hace mucho tiempo Tom Hanks el galardonado actor de cine protagonizó la película titulada "náufrago" fue uno de esos filmes de pocas palabras pero de una enorme carga emotiva, allí él hace el papel de un ejecutivo de la empresa de correos Fedex cuya agitada actividad lo lleva a volar por todo el mundo, mientras va en un avión 747 de carga se vuelve realidad el peor de sus temores, la nave se precipita en el océano Pacífico no lejos de una muy pequeña y deshabitada isla. El es el único sobreviviente y llega hasta la playa herido y tembloroso, pero afortunadamente vivo. En ese remoto pedazo de tierra vivirá durante 4 años completamente solo, los cambios que ocurren en él son lentos pero definitivamente amplios, experimenta grandes conflictos internos lucha intensamente tratando de encontrar palabras para expresarse y finalmente aprende a vivir con el mínimo necesario para la supervivencia en una isla. Pero en los Estados Unidos de América hacen un funeral en su honor y la vida sigue su rápido curso sin él. La manera como escapa es asombrosa pero lo bueno es que es recogido por un barco y finalmente regresa sano y salvo a un mundo en el que la vida no es familiar como lo era antes y en el que no cuadra en absoluto. Los cambios que ha experimentado son tan radicales, tan completos, que se ha convertido en una nueva persona mucho más sencilla mucho más observadora, mucho menos exigente, todo como resultado en las lecciones aprendidas en el silencio y la soledad de una isla.

Esto fue lo que le paso a Pablo tuvo un cambio.

Después de que Ananias oró por el y recibiera la vista nuevamente, Pablo estuvo en un desierto un lugar separado de su antigua manera de vivir, en aislamiento como estamos ahorita, en silencio... probablemente la pasó solo, pensando, orando, luchando interiormente pero sobre todo escuchando al Señor. Antes quizás estaba muy interesado en ser popular por su gran conocimiento, pero perdió todo deseo de buscarlo, despues de este tiempo ese orgullo se derritió en la presencia de Dios. Allí se encontró con Dios de una manera íntima y profunda, en medio del silencio y de la soledad tomo un curso intensivo de sana doctrina del cual surgiría toda una vida de predicación enseñanzas y escritos que han impactado el mundo entero.

Después de este tiempo de silencio y quietud no podemos salir iguales, es necesario ser transformados por medio de la obra que el Espíritu Santo esta haciendo en nuestras vidas. Es evidente que de aqui en adelante el mundo no será el mismo y por eso al igual que Pablo debemos crecer, fortalecernos y ser moldeados para salir a la conquista esta vez sin buscar lo nuestro, sin temor, sin excusas sino avivados en Dios para poder decir como esta escrito en 2 Timoteo 4:7


Jorge y Marcela Bejarano



Comentarios

  1. Amén, tremenda enseñanza. Dios me ha enseñado a través del tiempo y de las pruebas que aún lo más sencillo se hace glorioso y milagroso a su lado. Yenny Rivera

    ResponderEliminar
  2. Gracias Jorge y Marcela, y si es verdad, el mundo va a ser totalmente diferente después de este tiempo y nosotros también seremos transformados, Dios hará grandes cosas en nosotros

    ResponderEliminar
  3. Debemos aprender de este tiempo que nos ha tocado vivir y decididamente actuar. Hay mucho por hacer para el reino de Dios.

    ResponderEliminar

Publicar un comentario

Entradas populares de este blog

VOLVIENDO A LOS BRAZOS DE NUESTRO PADRE DIOS

“Y levantándose, vino a su padre, y cuando aún estaba lejos lo vio su padre, y fue movido a misericordia, y corrió, y se echó sobre su cuello, y le besó”. (Lucas 15:20) En este capítulo, vemos como el Padre (Dios) por su inmenso amor y misericordia no le importó, ni cuestionó la condición en la que se encontraba este joven perdido, lo más importante para el padre fue su regreso, quien inmediatamente le recibe con sus brazos abiertos y le perdona. (Juan 3:16) nos muestra como Dios por amor a cada uno entregó a su único hijo, para aquel que en él crea “No se pierda”, sino que tenga vida eterna. Lo mismo nos puede suceder a cada uno de nosotros cuándo nos apartamos de nuestro Padre Dios llevando una vida de pecado, alejándonos de Él, pero cuando reconocemos nuestra falta y nos arrepentimos, siempre tenemos en Él su amor y misericordia. Su amor es tan grande que no nos cuestiona, no nos pide explicaciones, por el contrario se regocija de nuestra actitud hacia Él (humildad). Querido L...

¿NUESTRO CORAZÓN ES EL ALTAR DE DIOS?

ISAÍAS 29:13-14 “13  Dice, pues, el Señor: Porque este pueblo se acerca a mí con su boca, y con sus labios me honra, pero su corazón está lejos de mí, y su temor de mí no es más que un mandamiento de hombres que les ha sido enseñado; 14  por tanto, he aquí que nuevamente excitare yo la admiración de este pueblo con un prodigio grande y espantoso; porque perecerá la sabiduría de sus sabios, y se desvanecerá la inteligencia de sus entendidos.” Cuando DIOS me dio esta palabra entendí que aun cuando estábamos en la iglesia, en las reuniones, muchas veces sólo asistíamos más por hábito,  que otra cosa, tal vez porque te sentías bien estando en  ese lugar, pero no porque tuvieras  un verdadero deseo en tu corazón de buscar una palabra de parte de DIOS, ya que estando ahí solo te preocupabas de que llegaran tus discípulos o de servir o estar pendiente de lo que te dijera tu líder o pastor o por las preocupaciones del mundo, pero no te preocupabas por ad...

CREYENDO EN LAS PROMESAS DE DIOS

"Promesas" ... Sé que Dios te ha dado tantas promesas a lo largo de tu vida , que tal vez por el tiempo o por lo que has tenido que pasar   te has olvidado de ellas. Conocemos la historia de Abraham y Sara, que Dios les dio la promesa de que iban a tener un hijo   y   que su descendencia iba a ser numerosa Génesis 17:3-9, en un principio no creían en esa promesa por qué les parecía algo imposible pues ya eran avanzados de edad y Sara era estéril. Pero ¿Que sucedió?... Abraham necesitaba fe para poder creer en esa promesa, puede que Abraham y Sara se hubieran rendido por las circunstancias difíciles o por el tiempo que había pasado ... pero decidieron creer en esa promesa y poner su confianza en Dios.  Sabes, creer en las promesas de Dios también significa esperar con alegría, Cuando tenía 13 años Dios me dio una promesa en Isaías 10:27, y él me decía que a través de la unción que el derramará sobre mí, el quitaría el yugo... Y yo le creí, pero en esos mismo...