No temas, porque yo estoy contigo; no desmayes, porque yo soy tu Dios que te esfuerzo; siempre te ayudaré, siempre te sustentaré con la diestra de mi justicia.
Isaías 41:10
Nuestro corazón tiene la tendencia en caer en el temor y el miedo.
¿Pero que es el temor? miedo que se siente al pensar que algo dañino o negativo suceda o es aquello que provoca que un individuo corra o huya, este es un significado general.
Si vemos en la Biblia lo que habla respecto al temor es un espíritu maligno que nos detiene o nos frena para actuar o hacer algo y por el contrario nos hace correr para no enfrentar los desafíos de la vida y también nos impide vivir una vida abundante y maravillosa que el señor nos ha dado a través de la gran obra que hizo Jesús en la cruz. pero lo que quiere hacer el espíritu de temor en este tiempo es esclavizarnos en cada área de nuestras vidas evadiendo las responsabilidades y los desafíos que la vida trae para avanzar hacia la meta o hacia el éxito, también hace que venga la cobardía y la intimidación ante las circunstancias que enfrentamos por que el miedo esclaviza y paraliza.
El temor toca nuestras emociones trayendo la culpabilidad, soledad, preocupación, vergüenza, tristeza, desanimo, depresión y frustración también toca nuestra área espiritual y busca que nos alejemos de nuestra intimidad con Dios trae estancamiento para el crecimiento ministerial y para compartir del amor de Jesús a otras personas y en el área física trae enfermedad, muerte, dolor desórdenes alimentarios y falta de fuerza.
El enemigo es la fuente del temor y trata de atormentarnos, afligirnos y alejarnos del amor de Dios y que no hagamos las cosas para Él.
¿Pero cómo dejamos este espíritu de temor en Dios?
“En el amor no hay temor, sino que el perfecto amor echa fuera el temor; porque el temor lleva en sí castigo. De donde el que teme, no ha sido perfeccionado en el amor” 1 Juan 4:18.
Este versículo nos muestra que debemos confiar en Dios y en su perfecto amor por ello debemos leer, creer y proclamar la palabra en voz alta cada promesa que el señor nos ha dado atesorándola en nuestro corazón porque una promesa es algo que Dios ya te dijo que va a cumplir, cada vez que la confieses tu fe aumenta y tu temor disminuye debemos recordar que somos hijos de Dios y que Jesús nos da la victoria en la cruz donde ya derroto al enemigo.
Debemos aceptar el maravilloso amor de Dios por que Él quiere lo mejor para nosotros ya diseño un plan para cada uno Él nos cuida y pase lo que pase nada nos separa del amor de Dios.
Debemos orar, no solo un día a la semana o 2 sino que nuestra oración debe ser constante (diaria) 24/7 el apóstol pablo nos enseña que día y noche debemos orar como soldados de cristo y que todos los días debemos ponernos la armadura y derribar todos los ataques del enemigo declarando la sangre de Jesús. 1 Tesalonicenses 5:17 Orad sin cesar.
La fe se expresa en las oraciones junto con las acciones porque esta es la semilla que nos hacer avanzar y dejar el temor y lanzarnos hacer las cosas que Dios nos ha mandado hacer “Así que la fe es por el oír, y el oír, por la palabra de Dios.” Romanos 10:17. Por ello la fe debe aumentar.
Pidamos a Dios esa valentía y esa fuerza que proviene de el “Porque no nos ha dado Dios espíritu de cobardía, sino de poder, de amor y de dominio propio”.2 Timoteo 1:7 así que debemos depositar nuestra total confianza en Dios y ya no tendremos ningún temor, miedo o inseguridad de las cosas que vengan ante nosotros.
-LEIDY ESPITIA
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ResponderEliminarAmen
ResponderEliminarAmén, gracias Dios por tu amor echa fuera todo temor.
ResponderEliminarGracias Leidy
Amen
ResponderEliminarAmén, no dar lugar al temor, Dios nos da esa convicción.
ResponderEliminarDefinitivamente no podemos dejarnos influir por el temor o si no quedaremos paralizados y no podremos ver las bendiciones de Dios, es necesario postrarnos ante su presencia y obtener ese espíritu de poder.
ResponderEliminarEl temor es fuerte, grita, habla, susurra... pero debemos callar su voz con el dulce amor del Señor... bendiciones Leidy, gracias por compartir esta palabra, te queremos mucho!
ResponderEliminarSólo el que le conoce verdaderamente, le ama y cree, aquietara toda voz de temor.
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