Tú guardarás en completa paz a aquel cuyo pensamiento en ti persevera; porque en ti ha confiado. Isaías 26:3
Cuando llegamos a los caminos de Dios uno de los propósitos que tenemos es ser formados en nuestro interior renunciando a lo malo y permitiendo que Dios forme lo bueno de Él en nosotros y hay veces nos cuesta morir o renunciar a nuestro yo y es ahí donde empieza el proceso interno a definir el carácter de Dios en nosotros y él toma a personas, circunstancias o su misma palabra para enseñarnos que debemos ser transformados o renovados y aprender a confiar en ello.
Para poder entender que es un carácter tenemos que definirlo y es el conjunto de varios rasgos y cualidades que indican la naturaleza que hay en una persona en su forma de pensar y actuar, eso es lo que lo define como individuo en la sociedad y en su entorno y lo distingue de los demás, como es nuestra reacción ante el día a día en las pruebas y las circunstancias como dice la palabra en Mateo 7:24-29, ahí encontramos dos tipos de personas el prudente y el insensato el de carácter fuerte y el de Carácter débil los dos tienen los mismos problemas y las mismas dificultes pero la diferencia del uno al otro es que su carácter fue formado (el prudente) y el otro no (el insensato) terminando uno en bendición y el otro en ruina.
Cuando permitimos que Dios transforme nuestro interior aprendemos a madurar y a resolver con él las circunstancias difíciles, viviendo y actuando de una manera sensata esto me hacer acordar lo que pasa con algunos animales como la mariposa que antes era una oruga y paso por un proceso difícil y doloroso para poder llegar a ser esa bella y hermosa mariposa, también podemos verlo con el águila que su promedio de vida es de 80 años pero a la mitad de su vida también tiene un cambio de renovar su pico quitándoselo a golpes contra la montaña cuando sale su nuevo pico empieza arrancar sus plumas para que salgan unas nuevas después arrancha sus uñas con el pico para poder agarrar bien su presa y ese proceso es bastante doloroso y así sigue siendo unos de las mejores aves. Y de la misma manera un alfarero cuanto toma el barro y lo forma en una vasija y la lleva al fuego para secar y templarla y poder tener una contextura solida y así se crear las hermosas vasijas.
Y así mismo pasa con nosotros Dios nos pasa por unos procesos para moldearnos a la imagen de cristo el cual esto toma tiempo y pueda que sea también doloroso pero su fin es grandioso y glorifica en nombre de Dios porque reflejamos su verdadero carácter no podemos tener temor a los cambios por que los pensamientos de Dios son mejores que los nuestros.
Hoy le invito a que permita que Dios moldee su interior para madurar y llevar una vida plena en El mostrando su carácter en su vida y así mismo confíes en el plenamente para poder perseverar en todos nuestros sueños anhelos y metas que tenemos.
-Alejandro y Vilma Espitia
Amen! Los procesos son necesarios para que nuestro carácter sea transformado y podamos ser los que Dios desea que seamos !! Gracias 🙌🏼
ResponderEliminarAsí es! es necesario rendirnos ante nuestro Dios y dejar que Él nos cambie y forme para ser instrumentos para su gloria.
ResponderEliminarAsí es amen amen
ResponderEliminarAsí es los cambios pueden ser dolorosos pero después vienen las bendiciones.
ResponderEliminarDios entodo tiempo nos esta formando el caracter , siempre quiere lo mejor de nosotros tus hijos, asi nos duela y aunque no entendamos. nada
ResponderEliminarAmen. Es necesario la formacion en nuestro caracter
ResponderEliminarPara tener el carácter de Jesús es necesario rendirnos cada día a sus pies para conocer más de su voluntad!
ResponderEliminarAtte: Rossemarie Rizzo
Alcanzar esa madurez, nos demanda una constante entrega, más el justo por la fe vivirá!!
ResponderEliminarAmen, debemos permitir que sea Dios formando nuestro carácter, remover todo aquello incorrecto. A veces es un proceso que nos va a doler y costar pero es necesario para nacer de nuevo.
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