Juan 15,16 “Ustedes no me eligieron a mí, yo los elegí a ustedes. Les encargué que vayan y produzcan frutos duraderos, así el Padre les dará todo lo que pidan en mi nombre.”
Muchas personas en la iglesia han malinterpretado la palabra ministerio, lo primero que se les viene a la cabeza cuando escuchan esta palabra son los pastores y grandes multitudes y en sus mentes piensan que es algo muy difícil de alcanzar, pero en realidad en la Biblia las palabras ministro y servidor son sinónimos al igual que ministerio y servicio.
¡¡¡Quiero decirte que TU has sido escogido para ministrar!!! Y ministras, cuando sirves a otros.
Dios anhela que tu corazón pueda nacer al ministerio. Cuando haces algo por amor nadie tiene que motivarte, para ti es un genuino deleite servir a otros, no necesitas de aplausos ni reconocimientos porque te deleitas en hacer lo que le agrada a tu Dios.
Quiero compartirte 5 cosas que he aprendido para ver un fruto que permanezca en nuestro ministerio.
1. Debes estar siempre disponible y atento cuando Dios quiera usarte para servir a otra persona.
2. Ser sensible a las necesidades de quienes te rodean, no puedes servir a otros cuando eres indiferente a las necesidades de otras personas.
3. No puedes dejar escapar las oportunidades.
4. No debes esperar a las condiciones perfectas, solemos ponerle excusas a Dios por qué no nos sentimos preparados y nos cuesta salir de nuestra zona de confort.
5. Compromiso genuino con lo que Dios te ha dado sabiendo que si eres fiel en lo poco Dios hará que tu ministerio de mucho fruto que permanezca.
Quiero contarte al respecto algo que hace un tiempo tuve la oportunidad de aprender, una tarde, llegue del colegio y me sentía muy mal emocionalmente y mientras le contaba a Jesus todo lo que estaba pasando en mi vida, recibí un llamada de una amiga, que quería hablar conmigo, cuando ella llego estaba muy necesitada de alguien la escuchara y le mostrara el amor de Jesus, ese día ella pudo desahogarse conmigo y yo pude ser sensible a su necesidad y orar por ella, aunque aparentemente para mi no era el momento perfecto paras ser usada por Dios ¡ese día pude ver cómo el amor de Jesus trasformó su vida, quiero decirte que aquello que ha sido tu debilidad o dificultad es lo que puede convertirse en tu ministerio.
Ese día entendí que la llamada que recibí no fue de parte de una persona sino de Dios mismo, para mostrarme que él me ha escogido para ministrar a otros aun en medio mi debilidad, y pude entender que no hay dolor ni dificultad que supere el gozo que produce servirle a Dios.
Hoy te invito a aceptar la bendición de dejar que Dios ministre a otros a través de tu vida y puedas ver con tus propios ojos el fruto que se produce cuando sirves a Dios y a los demás porque amas el ministerio.
-MANUELA JAIMES
Qué buen blog Es maravilloso ver que se están levantando generaciones nuevas dispuestas a servirle a Dios y llamadas a hacer cosas mayores que las que les precedieron
ResponderEliminarTan linda esa reflexión
ResponderEliminarQue super, es verdad Dios lo utiliza a uno cuando menos lo esperamos y con las personas que talves menos imaginamos.
ResponderEliminarcuando dejamos a un lado nuestras propias necesidades y le servimos, El nos usa de manera extraordinaria
ResponderEliminarSuper Realmente Dios Usa La Dificultad para Su Glorificarse en Algo más Valioso
ResponderEliminarDejarnos usar por DIOS.... Amén
ResponderEliminarExcelentes los cinco puntos... ((cero excusas))
ResponderEliminarExelente reflexión amiga, Dios nos utiliza en todo momento gracias por darnos tu testimonio 💛
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