7En esa época pensaba que todo eso era muy valioso, pero gracias a Cristo, ahora sé que eso no tiene ningún valor. 8 Es más, creo que nada vale la pena comparado con el invaluable bien de conocer a Jesucristo, mi Señor. Por Cristo he abandonado todo lo que creía haber alcanzado. Ahora considero que todo aquello era basura con tal de lograr a Cristo. 9 En él soy aprobado por Dios. No es que yo mismo me doy aprobación por lo que dice la ley, sino que Dios me aprueba por la fe en Cristo.[a] La aprobación viene de Dios por la fe. Filipenses 3:7-9
Antes de su conversión Pablo sentía un odio extremo contra Cristo y perseguía a los cristianos sin compasión, con dureza, los maltrataba. Su religiosidad y su conocimiento en la ley lo llevaba a pensar que aquello que hacía, era correcto y era su deber hacerlo.
¿Pero quien lo motivo a cambiar? Un Encuentro verdadero con el mas grande; con Cristo, cambio su vida, sus pensamientos, sus costumbres…” Mas yendo por el camino, aconteció que, al llegar cerca de Damasco, repentinamente le rodeó un resplandor de luz del cielo; y cayendo en tierra, oyó una voz que le decía: Saulo, Saulo, ¿por qué me persigues? Él dijo: ¿Quién eres, Señor? Y le dijo: Yo soy Jesús, a quien tú persigues.” Hechos 9:3-5.
A pesar de que Pablo decía no conocerle le respondió ¿Quién eres señor? El fue consciente de la presencia de Dios y de repente se cayo la venda de sus ojos y entendió que aquel que la hablaba era su Señor.
Muchos saben que hay un Dios todo poderoso, saben como buscarlo, aun como encontrarlo, pero se resisten a hacerlo; algunos porque saben que les implica dejar su pecado y se deleitan en los placeres que les ofrece el mundo; otros por temor, sienten que han hecho tantas cosas incorrectas que no alcanzaran su misericordia.
“yo soy Jesus a quien tu persigues¨ Hechos 9:5 fue con esta contestación que toda la vida de Saulo de Tarso fue cambiada, sus valores, principios y metas se derrumbaron, El Señor había extendido la mano hacia Pablo para alcanzarlo.
No te resistas más, cuando Dios toca la vida de una persona, nunca mas vuelve a ser el mismo, el desea trasformar tu vida y hacer parte de ella voluntariamente.
Pablo se dejo alcanzar por Dios, convirtiéndose en su mejor discípulo, el Señor lo rescato de su propia justicia, de sus propios esfuerzos y le regalo el perdón, la redención, la esperanza y la vida eterna; lo mismo desea hacer contigo. “Ríndete y confía en alguien más grande.”
Willinton y Yenny Patricia Murcia
Amén y amén
ResponderEliminarNixon
Amén, solo un verdadero encuentro con Dios cambiará nuestra vida, y todo aquello que tenia valor fuera de El deja de ser importante, para darle prioridad a lo verdadero.
ResponderEliminarEl acto de rendir es sinónimo de una vida dispuesta a amarle y no dudar de su bondad. Amén amigos
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