Ir al contenido principal

DEPENDIENDO DEL AMOR DE DIOS

"Porque como la hierba pronto se secarán, como plantas verdes, pronto se extinguirán" (Salmos 37:2)

En muchas ocasiones pensaba que todas las cosas que hacía estaba bien a mi forma de pensar por orgullo y autosuficiencia tome algunas decisiones que fracasaron por no depender de Dios ni de su amor, sino por dejar que esto me gobernara y entendí que todo lo debo hacer rindiéndome a los pies de Jesús.

Hay una historia de la Biblia que me gusta y habla sobre la dependencia y confianza absoluta en Dios y es la historia del rey Josafat esta se encuentra en (2 crónicas 20:1-30) un hombre que admiro por su amor y entrega a Dios y por colocar toda su confianza y dependencia en él, lo que más me impacta sobre esta historia es como este gran hombre llevó a todos sus guerreros del pueblo de Judá a también confiar en Dios de que él les iba a dar la victoria en la guerra contra los moabitas, amonitas y algunos de los menonitas, aunque el ejército del rey Josafat al ver sus contrincantes tuvieron mucho miedo porque los superan en número también en armamento y fuerza, pero aun así siguieron confiando y adorándolo. Por esta determinación Jehová les dio la victoria confundiendo a sus enemigos y destruyéndose entre ellos mismos.

Aquí podemos ver que aunque tengamos miles de batallas o muchos gigantes el cual debamos enfrentar como lo hizo otro gran Hombre el Rey David cuando derrotó en su juventud al Gigante Goliat que depende del amor de Dios él nos da la victoria en cada situación que enfrentemos.

Querido lector hoy te quiero invitar a que te rindas a los pies de Jesús, aunque tengas batallas que pelear, gigantes que derribar y desiertos que pasar pon toda tu confianza y siempre depende del amor inagotable e insaciable de Dios.

Oración:

“Amado Dios hoy quiero entregarte mi vida por completo, entregarte mis luchas, mis debilidades, mis sueños y mis propósitos en tus manos, ya que en ti solo puedo confiar y depender de tu amor en el que me llena de paz y tranquilidad.”

-David Espitia




Comentarios

  1. Así sea David, muchas gracias. Que mensaje tan oportuno. Dios te bendiga. ❣️

    ResponderEliminar
  2. Rendirnos y darle con control de nuestras vidas a Dios no es tan simple como parece, no hay un instructivo o testimonio que nos guíe en como hacerlo. Sin embargo es la fé la que nos lleva a dar pequeños pasos, para cuando miramos atrás en nuestro proceso es cuando entendemos que lo peor ya paso y que lo mejor esta por llegar.

    ResponderEliminar
  3. Buenos días y de antemano gracias por su compartir. Esto me hace acordar cuando en tiempos pasados decía creer en Dios totalmente pero en el fondo casi siempre, por no decir siempre, actuaba, pensaba y hablaba en mi voluntad (y eso que era cristiano). Doy gracias a Dios porque me enseño lo más valioso que tengo en mi vida y es su sagrada escritura, en ella pude, puedo y podré vivir bajo su voluntad y hasta en las caídas podré confesárselo pues tengo confianza en mi Padre que saldré siempre victorioso.

    ResponderEliminar
  4. Amen!!! hermanito he visto como Dios te ha levantado te a hecho fuerte en muchas situaciones.. Eres un ejemplo para muchos jóvenes.

    -Leidy Espitia

    ResponderEliminar
  5. Amén, las batallas son del Señor cuando las confiamos en sus manos.

    ResponderEliminar
  6. Un corazón que se humilla es capaz de encontrar nuevamente la senda correcta 🙌

    ResponderEliminar

Publicar un comentario

Entradas populares de este blog

VOLVIENDO A LOS BRAZOS DE NUESTRO PADRE DIOS

“Y levantándose, vino a su padre, y cuando aún estaba lejos lo vio su padre, y fue movido a misericordia, y corrió, y se echó sobre su cuello, y le besó”. (Lucas 15:20) En este capítulo, vemos como el Padre (Dios) por su inmenso amor y misericordia no le importó, ni cuestionó la condición en la que se encontraba este joven perdido, lo más importante para el padre fue su regreso, quien inmediatamente le recibe con sus brazos abiertos y le perdona. (Juan 3:16) nos muestra como Dios por amor a cada uno entregó a su único hijo, para aquel que en él crea “No se pierda”, sino que tenga vida eterna. Lo mismo nos puede suceder a cada uno de nosotros cuándo nos apartamos de nuestro Padre Dios llevando una vida de pecado, alejándonos de Él, pero cuando reconocemos nuestra falta y nos arrepentimos, siempre tenemos en Él su amor y misericordia. Su amor es tan grande que no nos cuestiona, no nos pide explicaciones, por el contrario se regocija de nuestra actitud hacia Él (humildad). Querido L...

¿NUESTRO CORAZÓN ES EL ALTAR DE DIOS?

ISAÍAS 29:13-14 “13  Dice, pues, el Señor: Porque este pueblo se acerca a mí con su boca, y con sus labios me honra, pero su corazón está lejos de mí, y su temor de mí no es más que un mandamiento de hombres que les ha sido enseñado; 14  por tanto, he aquí que nuevamente excitare yo la admiración de este pueblo con un prodigio grande y espantoso; porque perecerá la sabiduría de sus sabios, y se desvanecerá la inteligencia de sus entendidos.” Cuando DIOS me dio esta palabra entendí que aun cuando estábamos en la iglesia, en las reuniones, muchas veces sólo asistíamos más por hábito,  que otra cosa, tal vez porque te sentías bien estando en  ese lugar, pero no porque tuvieras  un verdadero deseo en tu corazón de buscar una palabra de parte de DIOS, ya que estando ahí solo te preocupabas de que llegaran tus discípulos o de servir o estar pendiente de lo que te dijera tu líder o pastor o por las preocupaciones del mundo, pero no te preocupabas por ad...

CREYENDO EN LAS PROMESAS DE DIOS

"Promesas" ... Sé que Dios te ha dado tantas promesas a lo largo de tu vida , que tal vez por el tiempo o por lo que has tenido que pasar   te has olvidado de ellas. Conocemos la historia de Abraham y Sara, que Dios les dio la promesa de que iban a tener un hijo   y   que su descendencia iba a ser numerosa Génesis 17:3-9, en un principio no creían en esa promesa por qué les parecía algo imposible pues ya eran avanzados de edad y Sara era estéril. Pero ¿Que sucedió?... Abraham necesitaba fe para poder creer en esa promesa, puede que Abraham y Sara se hubieran rendido por las circunstancias difíciles o por el tiempo que había pasado ... pero decidieron creer en esa promesa y poner su confianza en Dios.  Sabes, creer en las promesas de Dios también significa esperar con alegría, Cuando tenía 13 años Dios me dio una promesa en Isaías 10:27, y él me decía que a través de la unción que el derramará sobre mí, el quitaría el yugo... Y yo le creí, pero en esos mismo...