Según su familia, Elisey amaba la música incluso antes de que él naciera. Cada vez que su hermana mayor tocaba el piano durante el embarazo de su madre, el bebé “bailaba” dentro de su útero. A medida que crecía, continuó escuchando a su hermana y luego comenzó a tocar él mismo a la edad de 3 años. No pasó mucho tiempo antes de que sus padres se dieran cuenta de que su pequeño hijo era un prodigio. Cuando tenía 5 años, Elisey tocó junto al pianista Denis Matsuev en una competencia de televisión rusa llamada “Blue Bird”, deslumbrando a los espectadores. Desde entonces, su talento y su fama han crecido. Ahora estudia en la Escuela Central de Música del Conservatorio de Moscú y realiza conciertos y giras. En este año 2020 cumplió 10 años.
En el caso de Elisey podemos ver a un niño prodigio, pero también vemos a unos padres que supieron influir positivamente sobre su vida para ayudarle a desarrollar sus talentos.
Muchos de nosotros cuando pensamos en nuestros años de niñez, también pensamos en que podríamos haber tenido más oportunidades para desarrollarnos como artistas, para hacer realidad nuestros sueños. Pero a medida que los años fueron pasando nos fuimos acomodando a nuestra realidad, algunos llevando una marca de frustración y otros resignándonos a la realidad que nos correspondió, siempre muy lejana de aquellos sueños de infancia, porque seguramente nuestros padres trabajaban y les daba apenas para sostenernos, darnos la educación y tener vacaciones de vez en cuando. Incluso también pensamos lo maravilloso que hubiera sido haber conocido al Señor desde nuestra infancia, haber nacido en un hogar cristiano.
Pero hoy Tenemos la oportunidad de levantar nuestros hijos en el temor del Señor, influirles con el amor de Dios, con un testimonio impecable en nuestros hogares, en toda nuestra manera de vivir, de hacer las cosas, de manejar los negocios y tratar a las demás personas con amor y amabilidad demostrando el amor de Dios en todo lo que hacemos y la integridad en todas nuestras decisiones, de esa manera nuestro ejemplo y nuestro testimonio influirá poderosamente en la vida de nuestros hijos para que tengan lo más importante que un cristiano debe tener: el carácter de Cristo descrito en el fruto del Espíritu Santo.
Y además de esto debemos asumir el reto de descubrir los talentos inclinaciones y habilidades de nuestros hijos para ayudarles a desarrollarlas y que lleguen tan lejos como nosotros hubiéramos deseado llegar si hubiéramos contado con lo que nuestros hijos cuentan hoy.
El doctor James Dobson hablando acerca de estos asuntos dice que a los niños se les debe motivar e inspirar, ayudar, sobornar, presionar y lo que sea necesario para que desarrollen sus talentos desde pequeños y no darle lugar a tanto ocio o desperdició del tiempo para que finalmente tengan una plataforma firme cuando empiecen su adolescencia. Los deportes, las artes y toda clase de disciplinas que implican concentración y esfuerzo, los mantendrán lejos de las malas amistades y les ayudarán a desarrollar su dominio propio para resistirse a las presiones de este mundo como los vicios etcétera.
Como padres cristianos no debemos tener temor de explorar las habilidades de nuestros hijos porque este mundo necesita deportistas, políticos, artistas y profesionales en todas las áreas que hagan las cosas de manera excelente y que den testimonio de Cristo donde se muevan porque hay personas que necesitan del Señor en todos los lugares y en todas las esferas.
Si nos ponemos a reflexionar detrás de un Falcao hay una madre que estuvo domingo tras domingo llevando a su hijo a los entrenamientos. Detrás de un gran artista hay unos padres que sacaron tiempo para llevarlo a la academia de artes a estudiar. Siempre se necesita invertir tiempo, esfuerzo y finanzas para que nuestros hijos desarrollen sus talentos maravillosos. No todos en la iglesia van a ser Pastores, pero Dios tiene un lugar preparado para cada uno donde debe brillar. Influyamos a nuestros hijos para encontrar ese lugar y desarrollar sus talentos con excelencia.
-ALEX Y LEITO ARDILA
Genial el blog Alexito y Leo. Los padres definitivamente tienen una gran responsabilidad con sus hijos de instruirlos en el camino de DIOS y ayudarles a descubrir sus dones y desarrollarlos tempranamente, así como con los hijos espirituales.
ResponderEliminarAsí es!!!!
ResponderEliminarLos hijos deben ser influenciados desde casa y no ser el mundo su influencia !! Gracias
ResponderEliminar