EL PODER DE LA PALABRA DE DIOS

Apocalipsis 12:11

 Y ellos le han vencido por medio de la sangre del Cordero y de la palabra del testimonio de ellos, y menospreciaron sus vidas hasta la muerte.

Hay poder en la palabra de Dios: Poder para crear, para transformar, para desatar vida, para cambiar nuestra naturaleza y nuestras circunstancias, para vencer sobre cualquier situación u obstáculo  que el enemigo  haya levantado contra nosotros. Cuando Dios creó el mundo y lo que en él existe lo hizo a través de su palabra.

Es tan poderosa que  sostiene la creación: Él dijo hágase y fue hecho. Por eso es tan importante que ella sostenga nuestra vida y todo lo que somos.

Una palabra debe dirigir nuestra  vida sentimental, espiritual, ministerial, económica y todo lo que hacemos debe ser direccionado por su consejo a través de ella.

Así será Mi palabra que sale de Mi boca, No volverá a Mí vacía Sin haber realizado lo que deseo, Y logrado el propósito para el cual la envié.

Recuerdo que una de las experiencias más instructivas que tuve acerca de la palabra de Dios fue cuando mi hijo menor se enfermó y lo llevamos donde nuestro Pastor para que orara por él y  nos dijo: Los médicos dicen, pero Dios dice.

Entonces buscamos lo que Dios nos diría a través de su palabra y su respuesta fue: Esa enfermedad no es para muerte sino para la gloria de Dios.

Pero cuando la situación se volvió más angustiosa, yo oraba y le decía al Señor: porque no te lo llevas y no lo dejas sufrir más, hasta que un día, estando él en cuidados intensivos, me recosté sobre su pecho y empecé a orar y fue cuando Dios habló a mi vida y me mostró que no estaba confesando la palabra que Dios había dado sobre esa situación, sino retrocediendo con oraciones que no eran conforme a su voluntad.

Fue cuando empecé a orar que la gloria de Dios se manifestara para poder ver su recuperación.

No importa lo que la gente diga, los médicos, las circunstancias; lo que Dios haya dicho se cumplirá sobre tu vida. 

Así es que tu oración debe estar fundamentada sobre una palabra, no sobre lo que tú piensas, sientes o deseas. Porque su voluntad y sus planes para nosotros siempre serán más altos que los nuestros.

Cuál es la situación que estás atravesando ? Enfermedad, pobreza, aflicción, un hijo en problemas. No importa lo difícil o imposible que parezca superar esa situación. Lo importante es activar el poder de la palabra de Dios, pues Él cumplirá su promesa sobre tu vida. 

Confiésale, estúdiala, créela y veras como se hace una realidad. Apégate a sus promesas, porque Él siempre las cumplirá. Y lo que hablo con su boca, lo hará con    su mano una realidad

-Carlos y Estella