Ir al contenido principal

BUSCANDO EN LA INTIMIDAD A DIOS


Plenamente conocido Dios mío eres tú; De madrugada te buscaré; Mi alma tiene sed de ti... Porque mejor es tu misericordia que la vida. Salmo 63.1, 3

¿Alguna vez ha deseado que alguien le entienda, le aprecie, le respete y le quiera por lo que usted es? Esto se debe a que fue hecho para la intimidad: una relación personal íntima, profundamente satisfactoria, que le fortalezca, le edifique y le estimule hasta la médula.

Desdichadamente, el pecado puede evitar que disfrute de la comunión para la que fue creado. Puede que incluso esté buscando confort o significado en fuentes que no pueden saciar sus anhelos... tales como las posesiones, la prominencia o las adicciones.

El rey David, autor del Salmo 63, comprendía esto. Él tenía todo lo que una persona pueda desear, pero concluyó que el único que genuinamente podía satisfacer su alma era Dios.

Esto también es cierto para usted. El Padre le creó a su imagen a fin de que pueda interactuar con Él de una manera profundamente significativa, que satisfaga sus anhelos más hondos. Y, a medida que Él se le revela, usted descubre el contentamiento sincero, la razón para su existencia, y la esperanza para su futuro.

Padre, gracias por entenderme y amarme tal como soy.  Amén.

En su presencia... disfrute de ser plenamente conocido



Comentarios

  1. Gracias. Estar en la presencia del Señor es el mayor privilegio que tenemos ahí estaremos seguros.

    ResponderEliminar
  2. Amén. La intimidad con el señor es la que nos da plenitud.

    ResponderEliminar
  3. Necesitamos la presencial de Dios, es nuestro habitat natural, Gracias
    Maribel Ramirez

    ResponderEliminar
  4. Gracias por su mensaje que el espíritu Santo nos de la fuerza cada mañana para estar en la presencia de Dios

    ResponderEliminar
  5. Amén. Solo el Señor puede colmarnos.

    ResponderEliminar
  6. Amén pastor. Sin el Señor nada somos, el es nuestra guía y nuestra ayuda en todo momento

    ResponderEliminar

Publicar un comentario

Entradas populares de este blog

VOLVIENDO A LOS BRAZOS DE NUESTRO PADRE DIOS

“Y levantándose, vino a su padre, y cuando aún estaba lejos lo vio su padre, y fue movido a misericordia, y corrió, y se echó sobre su cuello, y le besó”. (Lucas 15:20) En este capítulo, vemos como el Padre (Dios) por su inmenso amor y misericordia no le importó, ni cuestionó la condición en la que se encontraba este joven perdido, lo más importante para el padre fue su regreso, quien inmediatamente le recibe con sus brazos abiertos y le perdona. (Juan 3:16) nos muestra como Dios por amor a cada uno entregó a su único hijo, para aquel que en él crea “No se pierda”, sino que tenga vida eterna. Lo mismo nos puede suceder a cada uno de nosotros cuándo nos apartamos de nuestro Padre Dios llevando una vida de pecado, alejándonos de Él, pero cuando reconocemos nuestra falta y nos arrepentimos, siempre tenemos en Él su amor y misericordia. Su amor es tan grande que no nos cuestiona, no nos pide explicaciones, por el contrario se regocija de nuestra actitud hacia Él (humildad). Querido L...

¿NUESTRO CORAZÓN ES EL ALTAR DE DIOS?

ISAÍAS 29:13-14 “13  Dice, pues, el Señor: Porque este pueblo se acerca a mí con su boca, y con sus labios me honra, pero su corazón está lejos de mí, y su temor de mí no es más que un mandamiento de hombres que les ha sido enseñado; 14  por tanto, he aquí que nuevamente excitare yo la admiración de este pueblo con un prodigio grande y espantoso; porque perecerá la sabiduría de sus sabios, y se desvanecerá la inteligencia de sus entendidos.” Cuando DIOS me dio esta palabra entendí que aun cuando estábamos en la iglesia, en las reuniones, muchas veces sólo asistíamos más por hábito,  que otra cosa, tal vez porque te sentías bien estando en  ese lugar, pero no porque tuvieras  un verdadero deseo en tu corazón de buscar una palabra de parte de DIOS, ya que estando ahí solo te preocupabas de que llegaran tus discípulos o de servir o estar pendiente de lo que te dijera tu líder o pastor o por las preocupaciones del mundo, pero no te preocupabas por ad...

CREYENDO EN LAS PROMESAS DE DIOS

"Promesas" ... Sé que Dios te ha dado tantas promesas a lo largo de tu vida , que tal vez por el tiempo o por lo que has tenido que pasar   te has olvidado de ellas. Conocemos la historia de Abraham y Sara, que Dios les dio la promesa de que iban a tener un hijo   y   que su descendencia iba a ser numerosa Génesis 17:3-9, en un principio no creían en esa promesa por qué les parecía algo imposible pues ya eran avanzados de edad y Sara era estéril. Pero ¿Que sucedió?... Abraham necesitaba fe para poder creer en esa promesa, puede que Abraham y Sara se hubieran rendido por las circunstancias difíciles o por el tiempo que había pasado ... pero decidieron creer en esa promesa y poner su confianza en Dios.  Sabes, creer en las promesas de Dios también significa esperar con alegría, Cuando tenía 13 años Dios me dio una promesa en Isaías 10:27, y él me decía que a través de la unción que el derramará sobre mí, el quitaría el yugo... Y yo le creí, pero en esos mismo...